top of page
Foto del escritorSilvia Berdejo Gomez

Reminiscencia

La gente solo quiere recordar los buenos recuerdos y olvidar los malos, pero ¿Qué pasaría si esos malos recuerdos te hacen ser tú? Desde que salieron las tiendas de Reminiscencia, no pienso en otra cosa.

Estas tiendas se dedican a borrar los recuerdos malos y a insertar nuevos recuerdos mejorados para ocupar el lugar de los originales. Muchos acuden a estos sitios para borrar una infancia deprimente, una noche loca o un año desastroso por recuerdos inolvidables. Pero, ¿Por qué lo hacen? Fácil, porque todos queremos llevar una vida feliz, sin embargo el hacer eso no deja de ser una mentira. Tu vida se convierte en una farsa y ya no sabes lo que es real y lo que no.

Hace mucho tiempo que pienso así, ya que creo que tengo unos recuerdos que no son míos. Sin embargo eso no es posible, ya que las dudas sobre mis recuerdos, se remontan a antes de la aparición de las tiendas de Reminiscencia.

Todo empezó cuando vi la rosa azul. Vi una rosa azul en la biblioteca de mi universidad y supe que pasaba algo. Recordaba esa rosa y sabía que tenía un significado para mí, pero no lo recordaba. Después de ese día, fui viendo más rosas azules en distintos lugares, como si la rosa quisiera que recordara.

Finalmente decidí ir a todas las tiendas de Reminiscencia que me encontraba y preguntar si me reconocían, si había utilizado sus servicios alguna vez. Todas respondían lo mismo, nunca me habían visto.

—Hola cielo, ¿Dónde has estado? — preguntó mi madre al verme entrar en casa.

—Por ahí, dando un paseo — mentí.

—¿Has oído la noticia? — me preguntó mientras hacía la comida.

—¿Qué noticia?

—El multimillonario Sadler Pick va a expandir su negocio de Reminiscencia y quiere contratar a jóvenes promesas para crear nuevos recuerdos mejorados para los clientes. Ése Pick debería ir a la cárcel por lo que está haciendo.

Mi madre siempre ha guardado un odio especial al creador de Reminiscencia, aunque no sé muy bien por qué.

—Mamá, respecto a eso, ¿Cómo sabes que los recuerdos que tienes son tuyos y no de Reminiscencia?

—Es que no lo puedes saber, ahí está la cosa — se ríe mi madre.

—Verás, es que últimamente tengo una sensación extraña — confieso— como si los recuerdos que tengo no fueran míos.

—¡Eso es una tontería! ¿Por qué dices eso?

—No lo sé, todo empezó cuando vi una rosa azul en la biblioteca y…

Me quedo callada al ver la reacción de mi madre, que momentáneamente ha dejado de batir los huevos para mirar a la ventana de la cocina, hacia el infinito.

—¿Mamá?

—¿Dónde viste esa rosa azul? — me pregunta muy seria

—En la biblioteca de la universidad, ¿Por qué?

Entonces se gira realmente afectada y busca las palabras que sus labios no quieren decir:

—Sabía que algún día pasaría esto, aunque tu padre me dijera que eso no era posible — empieza.

—¿Mamá? — pregunto un poco asustada.

—Esa rosa azul tiene un significado — dice — tú no lo recordarás, pero no eres hija única, tuviste una hermana, una hermana gemela. En aquella época tu padre y yo estábamos sin dinero, me quedé embarazada muy joven y nuestros padres no querían saber nada de nosotros después de eso. Teníamos que buscarnos la vida y acudimos a la única persona que nos podía ayudar, acudimos a Sandler Pick, antiguo vecino y amigo de tu padre. Él nos ayudó a salir del hoyo, pero su ayuda tenía un precio. Cuando se enteró de que estaba embarazada de gemelas, decidió que una de vosotras le pertenecía. Su mujer y él habían intentado tener hijos muchas veces, pero él es estéril. No nos quedó otra y le dimos a tu hermana. — confiesa mi madre entre lágrimas.

Intento encontrarle un sentido a todo y veo como las piezas van encajando poco a poco. El odio de mi madre por Sandler Pick, el hecho de que no conozca a mis abuelos… todo va encajando excepto una cosa:

—¿Y la rosa? — pregunto

—Sandler nos estuvo pagando durante años después de que le entregáramos a tu hermana, era parte del trato y cada mes nos llegaba una rosa, una rosa azul que significaba que el dinero había llegado a nuestra cuenta.

De pronto caigo en la cuenta y me horrorizo al pensarlo.

—Me borrasteis los recuerdos, para que no recordara a mi hermana ni nada de lo que pasó, Sandler Pick borró mis recuerdos.

—Lo siento — contesta llorando mi madre.

Ajena a sus sentimientos, pienso en otra cosa.

—Pero, entonces, ¿Por qué veo rosas azules ahora? ¿Quién las deja ahí?

Sin esperar la respuesta de mi madre salgo de casa aturdida, con la esperanza de que el aire fresco me calme. Mis pies se mueven solos, no sé a dónde me llevan hasta que lo veo. La mansión de Sandler Pick, creador de las tiendas de Reminiscencia, se alza ante mí.

Una figura se aproxima, lo primero que veo de ella es una rosa azul y poco a poco la figura se va definiendo hasta que al final, la veo. Es ella, la que me dejaba las rosas, su rostro es exactamente al mío y se me acelera el corazón. Ella es mi hermana.

Si te ha gustado…

Para escribir esta historia me he inspirado principalmente en Blade Runner, una de mis películas favoritas, basada en el famoso libro: “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?” de Philip K. Dick, habréis notado la referencia a Blade Runner en los recuerdos, ya que al final de la película el protagonista se encuentra un pequeño unicornio hecho de papel y se da cuenta de que sus recuerdos también son falsos como los de los replicantes. He oído que van a hacer un “Blade Runner 2” y solo espero que no la fastidien, ya que me daría muchísima pena.

Con este relato quiero que penséis una cosa: ¿Estáis seguros de que los recuerdos que tenéis son vuestros y no una ilusión? Borrar nuestros recuerdos malos sería un error, porque es una manera de aprendizaje.

Dicho esto, espero que os haya gustado mi relato y que me dejéis vuestros comentarios, dudas y opiniones al respecto.

Y un saludo de Silvia!!

2 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Comentarios


bottom of page